De cien pacientes que reciben oxígeno mediante cánula nasal de alto flujo, se estima que el 60% aproximadamente evita ingresar a la Unidad de Cuidados Intensivos para recibir tratamiento a través de ventilación mecánica invasiva. Esta terapia de oxigenación se ha transformado en un soporte respiratorio de gran apoyo para la asistencia de enfermos con COVID-19 en el Hospital Regional Libertador Bernardo O’Higgins HRLBO (HRLBO).
“La cánula es un equipamiento que permite administrar oxígeno en muy alto flujo. Esto permite levantar flujos de oxígeno de 30 o más litros por minuto, permitiendo oxigenar zonas del pulmón que están fuera de funcionamiento, beneficiando directamente a nuestros pacientes”, aseguró el Subdirector Médico del HRLBO, Dr. Carlos Bisbal.
El rol de la cánula de alto flujo ha sido fundamental para enfrentar la pandemia global del coronavirus. De acuerdo a los señalado por el Jefe de Urgencia del Hospital Regional, Dr. Juan Pablo González “antes muchos de estos pacientes tenían que estar con un ventilador, lo que obliga a otros cuidados del enfermo porque el ventilador es muy invasivo, el paciente tiene que estar con sedación. Entonces, con la cánula el paciente está más cómodo, se puede mover, está consciente, tiene buena oxigenación y además de todo eso, es más fácil de usar para el equipo médico”.
Se recomienda el uso precoz de la oxigenación por alto flujo, dado que los beneficios para los pacientes que padecen SARS-COV-2 se registran con mayor éxito, justamente, en la etapa inicial de la enfermedad. La médico intensivista y Jefa de la Unidad de Paciente Crítico (UPC) del HRLBO, Dra. María Alicia Cid, asegura que “las ventajas son muy importantes ya que permite que los pacientes disminuyan su trabajo respiratorio, les disminuyen la sensación de falta de aire, mejora la oxigenación de la sangre, permite que el pulmón no se siga inflamando, obviamente no del todo y depende de cada caso, pero sin duda en algunos enfermos también ayuda a frenar este proceso de amplificación de la respuesta inflamatoria en nuestros pacientes”.
Por su parte, del Subdirector Médico, Dr. Carlos Bisbal agregó que “el ventilador mecánico invasivo tiene costos que pueden llegar a superar los 10 millones de pesos. La cánula de alto flujo tiene un costo infinitamente más bajo, los insumos son de mucho menor costo, de tal forma que es una terapia económica y muy segura para el paciente, sin riesgos asociados y que ha permitido salvar vidas”.
Este insumo médico escasea en el país y el mundo, sin embargo, una buena gestión y el apoyo por parte del Ministerio de salud ha permitido que el HRLBO cuente con cánulas suficientes. “Nosotros desde el principio de la emergencia y antes de la misma, contábamos con 8 cánulas. Luego, decidimos prepararnos para la emergencia sanitaria adquiriendo desde el Servicio de Salud 10 cánulas, el Ministerio de salud nos envió otras 10 cánulas más y adicionalmente el equipo de ingenieros y kinesiólogos del hospital repararon equipos en desuso y los adaptaron, recuperando 8 equipos más. Adicionalmente el MINSAL nos envió otros 10 cascos respiratorios. En definitiva, nos hemos preparado lo mejor posible para enfrentar la pandemia global”, concluyó el Director del HRLBO, Dr. Fernando Millard.